Tiempos de la Última Apertura del velo

Todo está ahí, todo está ahí mis niños de amor. ¿Qué más pues, van a buscar todavía? ¿Qué quieren más queridos niños? Son ya Libertad total, son Felicidad. No hay nada más que adquirir, ningún objetivo que alcanzar. Olviden todo lo que han aprendido y dejen traspasarse, inundar de vuestra Verdad profunda, nuestra naturaleza Eterna y profunda. ¿Qué quieren verdaderamente, queridos niños? Hoy, es tiempo de hacerse la pregunta. ¿Quieren continuar en este mundo ilusorio para engañarse, para esperar algún fin de los tiempos, o bien encontrarse en Eternidad, hoy, en el instante?
Hermanos y hermanas tan amados, somos ahí una infinitud en vuestro corazón, irradiando la Presencia que ustedes son. Aplaudimos este reencuentro que cantidades de ustedes viven cada vez más en la Gracia, en la Felicidad, en la Abundancia de Vida, cada vez más.

 Entonces Gratitud niños de Amor, Gratitud por este Don ya que es cuando ustedes se dan en totalidad que pueden verdaderamente encontrar la totalidad del Absoluto que ustedes son.
Dancen, dancemos juntos queridos niños, nosotros somos Danza, ustedes son Danza entonces olviden los sufrimientos y levanten vuelo en las profundidades de la inmovilidad, en la Vacuidad total, en este Silencio. Al corazón del Corazón, lo que se ha nombrado ese punto cero, ahí está la Respuesta. Ella no está en el exterior, ni al interior, ella ES de toda Eternidad. Ustedes son la Respuesta. Más allá de todo punto, más allá de todo tiempo y de toda forma, ES lo Esencial a Encontrar. Los amamos, somos el Amor, ustedes y nosotros, en Unidad, más allá de toda proyección, más allá de todo cuerpo y de toda historia.
Somos la danza. Entonces dancen, no se hagan más ninguna pregunta ya que no hay más pregunta que hacer, excepto “¿Quién soy yo?” Podríamos decir, y esto se les ha dicho ya, que esa es la única pregunta que podrá acompañar vuestro Regreso en las profundidades del Absoluto Silencio.



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